domingo, 8 de diciembre de 2013

CACHIVACHES

Sueño contigo
y desvelarme es morir

pues sueño contigo
y despierto sin ti.

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Frente a tu espalda claudiqué mis latidos sobre esa línea vertical que separa el debe del haber. ¿Por qué debió de haber, no?

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Durante el resto, la luz permanecerá estática en el infinito de la memoria. Pero a medida que avances, el camino se estrechará de tal manera que no serás capaz de verlo y te creerás perdido, aunque la puta luz permanezca estática en el infinito de nuestras vidas como una palabra indeleble o un deslumbrante sarcasmo. 

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A los recién nacidos, antes de enseñarles a hablar, probemos a enseñarles a escuchar. Tengan en cuenta que muchos de ellos, el día de mañana, ejercerán la política.

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Soñarnos es tan sencillo como ensartar un cirio con una hebra de hilo.

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Fuimos como la piedra y el polvo, que una nace a partir del otro. ¿Bonito? Depende.
Ella flotó. Yo me hundí hasta las cejas.

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La coherencia y el vocabulario.
Breve historia entre tu presente y mi pasado: Contigo iba junto. Sin ti, separado.

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Cabalgaré hasta el infinito de esta vida caduca y te enseñaré como a través de los años los recuerdos cambian la dimensión, la perspectiva y la dilatación de la sonrisa.

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En los excesos que uno comete está la pausa que se merece. Y el sexo es el sustituto del chocolate.

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Yo no pedí ser ausente, fueron tus ojos.

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Fue como si se conocieran de espaldas. La primera vez en la historia que el amor no entró a través de la pestañas.

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No me da miedo la muerte, sólo es una sentencia. La eternidad, esto me preocupa; la condena, porque si no estoy contigo no hay rehabilitación posible.

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A mitad de camino entre lo que llevo y lo que me queda vive la estela de un sueño. Y esa huella de tacón fino será mi tumba. Estrecha y fría, pero al menos una parte de ti será mía.

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2 comentarios:

  1. De lo que no cabe duda, tras leerte, es que holló en ti, marcó tus sienes y en ellas vagabundea perenne, de ese peregrinaje o en gran medida, brotan tus cachivaches,aunque algunos te nacen solos, independientes, como si anduvieran pegados a esos otros que son irrefutables.
    Me ha encantado, como siempre desde que te leo.
    Chapeau.
    Besos.
    Como siempre, también, tengo mis favoritos, pero me los guardo que si no parecerá un testamento el comentario.
    :)

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  2. Ja,ja,ja...Sí, dejó huella. Triste pero orgulloso de que lo hiciera, de esa huella nació el universo, concretamente, mi universo.
    Te confieso que me estoy volviendo adicto a tus comentarios.
    Un beso muy fuerte, Marinel. Y gracias por tus palabras.

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